martes, 28 de febrero de 2017

Día 2 (3): Cadaqués

Ruta en coche por la Costa Brava en 4 días: de Cap de Creus a Empúries


Llegamos a Cadaqués desde el Faro de Cap de Creus, por carretera tenemos unos 10km. Aparcamos el coche y nos vamos para el paseo marítimo de este bonito pueblo pesquero. Nos sentamos un rato en un banco frente al mar comiéndonos un bocadillo que hemos comprado de un producto típico de aquí, las anchoas de Cadaqués!, las anchoas se han pescado tradicionalmente aquí así que, había que catarlas. Seguimos paseando y nos encontramos con la estatua de Salvador Dalí quien vivió aquí, en la cala de Port Lligat, donde hemos estado esta mañana visitando su casa.

Cadaqués
Estatua de Dalí en el paseo marítimo

Yendo por el paseo marítimo vemos algunos edificios modernistas entre los que nos llama la atención la Casa Blaua de principios del siglo XX, muy bonita.

Casa Blaua

Vamos para la zona del casco antiguo por donde es un placer pasear tranquilamente por sus callejuelas empedradas con las casas pintadas de blanco. Éste fue un pueblo medieval con una muralla que rodeaba lo que es hoy el casco histórico por donde paseamos. Si os fijáis en el suelo, se conserva el rastell que es el pavimento original hecho con piedras procedentes de la orilla del mar, está colocado en forma de espiga para que cuando llueva haya menos riesgo de resbalar, muy curioso!. En la calle del Cau es donde mejor se conserva este tipo de suelo y como cosa graciosa, si seguís las indicaciones de un restaurante llamado la Sirena, veréis que en el suelo está dibujada una sirena con las piedras  ;-)


Seguimos subiendo hasta llegar junto a la iglesia de Santa María de Cadaqués que se encuentra en el punto más alto del pueblo. Aquí había inicialmente una iglesia que fue destruida por el pirata Barbaroja cuando asaltó el pueblo y después, se construyó en el mismo lugar la iglesia actual. Entramos y vemos un gran retablo barroco en el altar, como curiosidad, durante la Guerra Civil Española tapiaron el altar para proteger el retablo y gracias a eso no sufrió daños. Aquí también se encuentra uno de los órganos más antiguos de Cataluña.

Iglesia de Santa Maria de Cadaqués

Justo delante de la iglesia hay un mirador desde donde tenemos unas vistas muy buenas del pueblo con los tejados anaranjados de las casas y del mar al fondo. Desde aquí ya empezamos a callejear para abajo fijándonos en diferentes detallitos curiosos...


Buscamos la única pastelería donde nos han dicho que hacen el dulce típico del pueblo, los taps de Cadaqués que estén hechos de bizcocho con forma de tapón (tap en catalán) cubierto con azúcar y que los pescadores tradicionalmente se lo comían con ron. Pues una vez encontramos el lugar resulta que... ya se han terminado los taps, aggghhh!. Que rabia, nos quedamos sin catarlos!. Este dulce es muy parecido a uno que comí en Nápoles llamado babá, también en forma de tapón y es como un brioche bañado en ron, muy muy similar.


Ya junto al mar, seguimos el paseo por la Avenida de Víctor Rahola y cuando ya tenemos toda la perspectiva del pueblo delante nuestro, nos sentamos en un banco para ver como va anocheciendo y se va iluminando Cadaqués. Junto al banco donde estamos hay otra de las esculturas del pueblo llamada Lídia de Cadaqués.


Con estas bonitas imágenes damos por terminado el día y nos volvemos para el hotel en Roses. Mañana nos espera otro día interesante haciendo una caminata el Parque Natural dels Aiguamolls de l'Empordà y visitando Figueres.


Sigue leyendo aquí el día 3 (1): Parc Natural dels Aiguamolls de l'Empordà. 

miércoles, 22 de febrero de 2017

Día 2 (2): Cap de Creus: Caminata por el Paratge de Tudela y el Faro.

Ruta en coche por la Costa Brava en 4 días: de Cap de Creus a Empúries


Desde Port Lligat tenemos unos 4km en coche hasta el Paratge de Tudela donde haremos una caminata sencilla. En el Parque Natural de Cap de Creus hay hasta 17 itinerarios, nosotros hemos escogido éste por su curioso paisaje lunar.  Al llegar, dejamos el coche en la zona del aparcamiento que cuesta 5€, aquí está la caseta del punto de información donde nos dan un mapa del itinerario con explicaciones de lo que iremos viendo.


La ruta es muy sencilla por un camino asfaltado y plano donde hay diferentes desviaciones que llevan a lugares de interés, como veis, se puede hacer perfectamente si vais con niños. Empezamos saliendo desde el aparcamiento, está todo muy bien señalizado y con el mapa que nos dan, no hay pérdida posible. Si tenéis pensado venir en verano, traeros una gorra porque no hay ni una sombra. Nada más empezar, encontramos la primera desviación que nos lleva hasta... el Camello!.

Roca del Camello

Como veis esta roca parece un camello descansando frente al mar, está formado por roca plutónica que se formó por el enfriamiento lento y a gran profundidad de grandes masas de magma, muy interesante!.
Volvemos al camino hasta llegar al Mirador del Pla de Tudela que reconoceréis por dos grandes cubos de hierro. Estas estructuras recuerdan a las construcciones del Club Mediterranée que se instaló aquí en los años 60. Era una especie de ciudad de vacaciones con pequeñas casitas, piscina,...que por suerte, se eliminó en el 2006 para restaurar la zona como reserva natural. Abajo os dejo una foto que he encontrado en la web donde se ve como estaba la zona invadida por este complejo turístico.

Mirador del Pla de Tudela
Club Mediterranée en el Pla de Tudela (foto de web)

Muy cerca de aquí se encuentra el Mirador de la Gran Sala que mantiene algunos muros de construcciones del Club Mediterranée donde hay paneles informativos que merece la pena pararse a mirar. Desde aquí hay unas buenas vistas de la zona con el mar de fondo.

Mirador de la Gran Sala

Seguimos por el camino y las rocas que nos vamos encontrando parecen sacadas de un paisaje lunar, tienen unas formas espectaculares!. En esta zona están algunas de las rocas más antiguas de Cataluña con unos 500 millones de años. En algunas se distinguen muy bien los pliegues de cuando se formaron a altas temperaturas que después se han ido remodelando con el viento de tramontana que sopla aquí.


Nos desviamos al Mirador de la isla de Portaló desde donde las vistas son muy buenas con un islote negro saliendo del mar, wauuu, nos quedamos un rato admirando el paisaje y sintiendo la pureza del aire que nos llega del mar. Muy cerquita de aquí se encuentra el Mirador de Pauperris donde se ve la abrupta costa creada por la fuerza del mar y del viento.

Mirador de la isla de Portaló
Mirador de Pauperris

Seguimos el camino y apetece mucho pasear tranquilamente por aquí con el día tan bueno que nos está haciendo, menos mal que no sopla viento ya que aquí suele ser fuerte!. Nos encontramos con otra roca curiosa que nos llama la atención, es la Roca del Águila que por el efecto de la erosión tiene la forma de un águila con las alas abiertas. Si tenéis imaginación, mirando las rocas de este lugar veréis formas curiosas así que, no es de extrañar que el mismo Salvador Dalí se inspirara en estas formaciones rocosas para pintar sus cuadros surrealistas.

Roca del Aguila
Roca del Conejo y Roca Cavallera que inspiró un cuadro de Dalí

Seguimos caminando hasta el final de la ruta, el Mirador de Cala Tulip con una pequeña calita donde se puede bajar por unas escaleras. Desde arriba se ve el faro de Cap de Creus que es donde iremos después. Bajamos a la cala Gentils y nos quedamos junto a la orilla sentados un rato, que bien se está aquí!. Empezamos el camino de vuelta pero en lugar de hacer el mismo recorrido hasta el aparcamiento, vamos por el camino rocoso Rec de Francaló con zonas en pendiente pero bien señalizado y por el que se acorta un buen trozo. Si no queréis complicaros, volver por el camino asfaltado que es más suave y sin dificultad.

Faro de Cap de Creus
Mirador Cala Culip
Regreso por el Rec de Francaló

Ya en el párquing cogemos el coche y vamos hasta el Faro de Cap de Creus que está a unos 2km por carretera. Aparcamos en la carretera que pasa bajo el faro y subimos a ver la zona. Arriba hay un restaurante donde ya sabíamos que había que reservar, al no saber si llegaríamos a la hora de comer no lo hicimos así que ahora es imposible con toda la gente que hay aquí.

Faro de Cap de Creus

De aquí nos vamos con el coche a Cadaqués donde pasaremos la tarde...

Sigue leyendo aquí el día 2 (3): Cadaqués.

lunes, 13 de febrero de 2017

Día 2 (1): Port Lligat - Casa Museo de Dalí

Ruta en coche por la Costa Brava en 4 días: de Cap de Creus a Empúries


Hoy tenemos preparado un día súper interesante por la zona del Cap de Creus donde haremos diferentes paradas. Empezamos el día cogiendo el coche con destino a...

Port Lligat 
Desde Rosas tenemos unos 40 minutos hasta llegar a Port Lligat, son solo 16km pero por una carretera un poco serpenteante. En este pueblecito pesquero es donde el gran y extravagante pintor surrealista catalán, Salvador Dalí, vivió durante años y hoy... vamos a visitar la que fue su casa!. Al llegar dejamos el coche en un aparcamiento gratuito que hay cerca y vamos caminando junto a una pequeña playa hasta llegar a la Casa Museo de Dalí

Casa Museo de Salvador Dalí

Vamos a la taquilla a recoger y pagar las entradas que ya tenemos reservadas desde casa, como os comenté en la Preparación de la ruta, es necesario reservar con antelación obligatoriamente ya que se entra en grupos reducidos. Vimos a unos turistas franceses que llegaron sin reserva y se quedaron sin poder entrar ya que el día estaba completo y eso que era primera hora, nosotros entramos en el primer grupo de las 10'30h. La entrada nos ha costado 11€ a cada uno e incluye visita con guía por el interior de la casa y acceso libre al patio. No se puede acceder con mochilas o bolsas aunque sean pequeñas, se tienen que dejar en una consigna que hay en una casa de enfrente sin coste alguno. Pues...vamos para dentro, que ilusión!


Nada más entrar, nos recibe la imagen surrealista de un oso polar disecado sosteniendo una lámpara, daliliano total!. De aquí, la guía nos va llevando por diferentes salas de la casa y en cada una de ellas, nos hace una breve explicación en diferentes idiomas dejando tiempo para hacer fotos antes de pasar a otro lugar. Vemos el comedor y la biblioteca con más animales disecados ,esta vez son unos cisnes y un aguila.


Subimos una planta y aquí se encuentra un lugar muy importante, el taller donde Dalí pintó muchos de sus cuadros. Wauuu, solo imaginar lo que han vivido esas paredes!. Vemos las pinturas, pinceles y caballetes que utilizaba, también hay algunos cuadros sin acabar que parecen que estén esperando a que aparezca el genio loco por la puerta para terminarlos. También vemos la habitación de las modelos donde se cambiaban antes de posar.

Taller de pintura de Dalí
Habitación de las modelos

Seguimos la visita hasta el dormitorio donde dormían Dalí y su mujer Gala, su musa rusa. Gala era una enigmática mujer que siempre se había relacionado con artistas. Era 10 años mayor que Dalí, estaba separada y tenía una hija pero desde que conoció a Dalí ya no se separó de él hasta que murió en 1982 y fue enterrada en el Castillo de Púbol que Dalí le regaló. Ésta sería otra visita interesante que hacer por Girona, nosotros la tenemos pendiente para otra ocasión.

Dormitorio de Dalí y Gala

Vemos el cuarto de baño, el tocador de Gala, la habitación de los armarios que están decorados por Gala con fotos de la pareja de la época y una curiosa habitación llamada la Sala Oval rodeada por sofás con un tono de luz cálido.

Habitación de los armarios
Sala Oval

Aquí termina la visita al interior de la casa y salimos, ya por libre, a la zona del patio que es bastante grande. Aquí nos seguimos encontrando con muchas excentricidades dalilianas a cual más sorprendente, jejeje. Hay huevos, figuras extrañas, un ave-rinoceronte, jaulas para grillos, un olivar con la figura de un gigante muerto estirado en el suelo hecho con trozos de piedra, madera y una barca que hace de costillar,... Desde aquí las vistas al mar y a la bahía de Port Lligat son maravillosas!.


No os perdáis el audiovisual que se proyecta en una habitación del patio ya que salen imágenes interesantes de Dalí. Vamos a la zona de la piscina donde lo surrealista aumenta con una fuente rodeada de toreros, un asiento en forma de labios gigantes y unas ruedas Pirelli, solo a Dalí se le ocurriría poner esto en su patio!.


Pues aquí terminamos la visita a la Casa de Dalí, laberíntica, imaginativa y extravagante como el que fue su dueño quien vivió aquí hasta que murió Gala y marchó al Castillo de Púbol hasta que él también murió en 1989. La vivienda que hoy vemos era en sus orígenes una pequeña casa de pescadores, poco a poco Dalí fue comprando otras casas de los lados ampliando el terreno hasta lo que vemos hoy. No es de extrañar que aquí y en los alrededores Dalí encontrara la inspiración para pintar sus cuadros únicos...

Sigue leyendo aquí la continuación del día 2, Cap de Creus: Caminata por el Paratge de Tudela y el Faro.